La Federación, una ONG filial de la Women’s Federation For World Peace (WFWP) que entrega distinciones a mujeres y organizaciones que contribuyen al desarrollo de la sociedad y a una cultura de paz, decidió destacar la labor de la Fundación, creada el 19 de julio de 2016, con el objetivo de mejorar los primeros tres meses de vida de los recién nacidos que por distintas circunstancias deben permanecer en el Centro Hospitalario Pereira Rossell.
Los voluntarios se ocupan de auparlos, mimarlos, mecerlos, besarlos, cantarles, hablarles, acompañándolos las 24 horas durante los 365 días del año, con el fin de reducir los daños que la separación de su madre y la hospitalización produce en los recién nacidos.
La nutrición afectiva es fundamental en el desarrollo presente y futuro de todos los recién nacidos. Los bebés que reciben amor, atención y son bienvenidos y aceptados logran manejar mejor el stress, reducir los umbrales del miedo y la excitación. A su vez, aumentan la sociabilidad y la seguridad.
Estas acciones también favorecen la adquisición del lenguaje, las capacidades cognitivas y el fortalecimiento del sistema nervioso e inmunológico, logrando que cada uno de los pequeños egrese del centro hospitalario con mejores condiciones de salud física y emocional y un vínculo con su entorno más sano.